Una vez la cotizada tenismesista nacional Adriana Díaz logró su clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio en agosto de 2019, su mamá, Marangely González, comenzó a hacer arreglos para acudir a esa justa para ver competir a su hija.
Así las cosas, en septiembre de 2019 González empezó las gestiones para comprar los boletos para los partidos. Iría acompañada de la secretaria de la Federación Puertorriqueña de Tenis de Mesa (FPTM), Leticia Castaldo Franqui, y de la más pequeña del clan Díaz-González, Fabiola.
Con la declaración de una pandemia por el brote de coronavirus y el anuncio del atraso para 2021 de las Olimpiadas en marzo del año pasado, González puso un freno en sus gestiones para buscar pasajes y hospedaje. A principios de este año retomó los trámites confiando que Japón permitiría la entrada al público de otros países.
Sin embargo, este sábado se confirmó que no se permitirá la presencia de fanáticos extranjeros en la competencia más importante del mundo como medida cautelar en plena pandemia de coronavirus. Esta noticia dio al traste con los planes que tenía la abogada.
“Ya estábamos empezando de nuevo a buscar los hospedajes, los pasajes. Teníamos fecha (de salida) más o menos. Pero como escuchamos que para finales de febrero o principios de marzo iban a tomar una decisión sobre la entrada de extranjeros, nos aguantamos de comprar los pasajes esperando esa decisión final”, expresó la progenitora de la tenismesista número 16 del mundo.
“Esto ha sido bien triste porque esperamos la clasificación individual o en dobles mixtos de Melanie (Díaz). También está Brian (Afanador) y Danny (Daniel González). Hubiera sido súper especial ver a Adriana y a Melanie –si clasifica– y a mi sobrino (Brian Afanador). Queríamos hacerlo porque no hemos podido estar en todos los eventos porque económicamente no es viable y porque las Olimpiadas eran un evento que estábamos esperando con mucha emoción”, añadió González, que tuvo la oportunidad de ver a Adriana y a Brian en su primera participación olímpica en Río 2016.
Aunque reconoció sentirse apenada con la determinación del Comité Olímpico Internacional y de los organizadores locales, González dijo que entiende las razones que tiene el gobierno japonés para dicha prohibición.
“Si esto va a abonar a que los Juegos sean más seguros para la gente en Japón y para los atletas, pues que así sea”, razonó.
González recordó que cuando estuvo en Brasil, tuvo la oportunidad de compartir un rato con Adriana en la villa olímpica. Sin embargo, reconoce que esta no es la norma en eventos de esa envergadura.
“Nosotros tuvimos la oportunidad de visitar la villa olímpica porque se planificó desde Puerto Rico y después de un protocolo en el que tienes que entregar tu pasaporte y hacer varias gestiones. Ahí sí pude entrar y compartir con ella un ratito”, declaró.
“Me hubiera encantado tener esa oportunidad nuevamente (la de ir a unas Olimpiadas) porque tenemos la expectativa de la clasificatoria de Melanie. Hubiera sido muy especial compartir con las dos si se da de esa manera”, puntualizó sobre el pase olímpico que Melanie irá a buscar en abril en Argentina.